La mayoría de los episodios de dolor en los brazos a causa de una hernia discal cervical se resuelven dentro de un período que abarca unas pocas semanas a un par de meses. Sin embargo, si el dolor se mantiene por más de 6 a 12 semanas o si el dolor y la discapacidad que causa son severos, es posible que la cirugía de columna vertebral sea una opción razonable.
La cirugía de columna vertebral para una hernia discal cervical suele ser una solución confiable. La tasa de éxito es de cerca de un 95 a 98% en términos de brindar alivio al dolor de brazos.
Con un cirujano especializado en columna vertebral, la cirugía debería implicar un riesgo bajo de falla o de complicación, y puede realizarse con una cantidad mínima de dolor posoperatorio y morbilidad (consecuencias no deseadas).
La cirugía de hernia discal cervical puede ser realizada de varias maneras:
- Discectomía cervical anterior y fusión (DCAF). Este es el método más común entre los cirujanos de columna para la mayoría de los casos de hernia de disco cervical. A través de esta cirugía, el disco es removido a través de una pequeña incisión de una pulgada que se realiza en la parte frontal del cuello. Después de retirado el disco, el espacio del disco se fusiona (véase Figura 2). Es posible colocar una placa en la parte frontal del injerto para una mayor estabilidad y, posiblemente, una mejor tasa de fusión (véase Figura 3).
- Discectomía cervical posterior. Este procedimiento es similar a la discectomía lumbar por vía posterior (desde la espalda) y puede ser una estrategia razonable para los casos en los que los discos que sobresalen lateralmente en el agujero intervertebral (el "túnel" a través del cual el nervio viaja para salir del canal espinal). Sin embargo, es técnicamente más difícil que la estrategia anterior, porque hay muchas venas en este área que pueden causar una gran cantidad de sangrado, y el sangrado limita la visualización durante la cirugía. Este procedimiento también requiere de una mayor manipulación de la médula espinal.
Véase Cirugía de columna mediante microdiscectomía (microdescompresión)
- Cirugía de implantación de disco cervical artificial. Como en la DCAF, una cirugía de implantación de disco cervical implica la remoción del disco afectado a través de una pequeña incisión en la parte frontal del cuello. Sin embargo, en vez de una fusión en el espacio del disco, se coloca un disco artificial en dicho espacio. El objetivo del disco artificial es imitar la forma y la función del disco original.
A pesar de que todas las cirugías importantes tienen posibles riesgos y complicaciones, con un cirujano con experiencia en columna vertebral, es poco común que se produzcan complicaciones serias por la cirugía de disco cervical. Las dos cirugías más comunes, DCAF y disco artificial, son consideradas cirugías confiables con resultados favorables en términos de la reducción del dolor de los pacientes.
In This Article:
- Síntomas de hernia de disco cervical y opciones de tratamiento
- Pruebas diagnósticas para una hernia de disco cervical
- Tratamiento conservador para la hernia discal cervical
- Cirugía de la columna vertebral para una hernia discal cervical
- Video de la hernia de disco cervical
Cuidados posoperatorios de la cirugía de hernia discal cervical
Para las cirugías de tipo anterior, como la DCAF y la de disco artificial, no suele haber una gran cantidad de dolor posoperatorio. La cirugía se realiza a través de una pequeña incisión en la parte frontal del cuello y se puede acceder a la columna vertebral entre planos de tejido que no precisan ser cortados. Este tipo de cirugía, por lo general, puede ser ambulatoria (es decir, el paciente vuelve al hogar en el mismo día de la cirugía) o con una noche de estadía en el hospital.
El dolor en el brazo tiende a desaparecer rápidamente, a pesar de que puede tomar de unas semanas a unos meses hasta que disminuyan la debilidad y el entumecimiento. Es común experimentar dolor de cuello por un tiempo.
Durante el posoperatorio, la mayoría de los cirujanos de columna prescriben un cuello ortopédico, aunque el tipo de cuello ortopédico y la duración del uso pueden variar. Además, la mayoría de los cirujanos de columna pedirán a sus pacientes que limiten las actividades durante el posoperatorio, aunque la cantidad de restricciones y la cantidad de tiempo pueden variar. Antes de la operación, consulte con su cirujano de columna cuál es su protocolo habitual con respecto al cuidado posoperatorio.