Se suele pensar que los puntos desencadenantes son zonas sensibles del músculo o del tejido conjuntivo (fascia) que se vuelven dolorosas cuando se tocan o se sobrecargan, y a veces pueden remitir el dolor a otras partes del cuerpo. Un punto desencadenante puede tener numerosas causas, como una lesión aguda, el uso excesivo repetitivo o la irritación de las articulaciones facetarias de la columna vertebral, por nombrar algunas.

Se cree que el dolor en los puntos desencadenantes se debe a la formación de nódulos o “nudos” tensos en el músculo, que de otro modo sería liso. Una teoría para tratar este tipo de puntos desencadenantes es realizar ejercicios que reduzcan y alteren los nódulos que han causado el dolor.

Ejercicios para los puntos desencadenantes

A continuación, se presentan dos ejercicios que pueden ayudar a aliviar algunos tipos de dolor en los puntos desencadenantes:

Rodillo de espuma

Se puede utilizar un rodillo de espuma de 15 cm (6 in) de diámetro para trabajar algunos de los puntos desencadenantes que suelen acompañar al dolor de cuello.

  • Se coloca el rodillo de espuma en el suelo.
  • Acuéstese sobre él a lo largo.
  • Colóquese las manos en las caderas.
  • Ruede lentamente hacia los lados, manteniendo el torso paralelo al suelo hasta que el rodillo de espuma pase por encima de los músculos escapulares, donde se encuentran los puntos desencadenantes doloridos.
  • Ruede lentamente 20 veces hacia cada lado.

Pelota de ráquetbol

También se puede utilizar una pelota de ráquetbol para automasajear los puntos desencadenantes del omóplato.

  • Mientras se apoya con la parte superior de la espalda contra la pared, se coloca la pelota de Ráquetbol entre los músculos sensibles de los omóplatos y la pared.
  • Utilizando las piernas para mover el cuerpo, se hace rodar la pelota arriba y abajo sobre los músculos durante unos 2 minutos.
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Los puntos desencadenantes siguen siendo objeto de estudio

No existe consenso en la literatura médica sobre lo que constituye un punto desencadenante y cómo se desarrollan. Sin embargo, la mayoría de las definiciones tienden a describir un punto desencadenante de la siguiente manera:

  • Nódulo tenso en forma de nudo dentro de un músculo o fascia que puede palparse, ya sea por uno mismo o durante un examen médico.
  • Sensibilidad o dolor que se siente localmente y puede extenderse a otra zona del cuerpo.
  • Al tocarlo, el músculo puede crisparse y el dolor puede aumentar siguiendo un patrón de referencia conocido.
  • Disminución de la amplitud de movimiento en la zona que rodea el punto desencadenante debido al dolor y la rigidez.
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Muchas personas afirman haber encontrado alivio al dolor en los puntos desencadenantes incorporando ejercicios dirigidos a sus puntos desencadenantes específicos, como los mencionados anteriormente para el cuello y la espalda.

Gavin Morrison is a physical therapist and founder of Pro Motion Physical Therapy in Boise, ID. He has more than 15 years of experience providing outpatient orthopedic spine care, sports rehabilitation, and injury prevention training.

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