Las distensiones cervicales pueden ser desde ligeramente molestas hasta graves y pueden limitar los movimientos de la cabeza para realizar tareas básicas, como vestirse o ir a trabajar. Conocer los síntomas de la distensión cervical puede ayudar a identificar antes el problema y a encontrar tratamientos eficaces.
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Síntomas comunes de la distensión cervical
El dolor localizado en la posterior de la cabeza y el cuello es un síntoma común de la tensión del cuello.
Casi todos los casos de distensión muscular en el cuello son leves o moderados y acabarán por curarse, pero incluso estos casos pueden ser molestos e incómodos. Los síntomas comunes pueden incluir uno o más de los siguientes:
- Dolor localizado en la región del cuello. Las distensiones cervicales suelen sentirse en la nuca, o principalmente en el cuello y parcialmente en una región cercana, como la nuca, la parte superior de la espalda o el hombro.
- Dolor agudo o punzante. Un dolor sordo y persistente puede persistir y afectar potencialmente al sueño nocturno o a la concentración durante el día. Es probable que este dolor se sienta en lo más profundo del músculo.
- Dolor agudo. A veces, un dolor similar al de un cuchillo puede ser uno de los síntomas más intensos de la distensión cervical.
- Dolor que empeora con el movimiento. El cuello puede no tener dolor o tener un dolor sordo en reposo, pero luego tener un brote de dolor agudo con ciertos movimientos o actividades.
- Espasmos musculares. La inflamación provocada por la lesión puede desencadenar espasmos dolorosos en el músculo lesionado y, posiblemente, en los músculos cercanos.
- Rigidez del cuello. Puede resultar difícil mover el cuello en una o varias direcciones. La rigidez del cuello debida a una distensión se debe a la inflamación o a la tensión de los músculos para evitar lesiones posteriores.
Ver Causas, síntomas y tratamiento de la tortícolis
A veces, una distensión cervical puede ir acompañada de otra lesión o afección, que puede causar síntomas adicionales.
Distensión cervical crónica por malas posturas
La mala postura o los movimientos repetitivos pueden resultar en tensión del cuello.
Aunque la mayoría de las distensiones cervicales desaparecen por sí solas en unos pocos días, la curación no puede tener lugar si la distensión muscular se vuelve a lesionar con regularidad. Esta situación es especialmente frecuente cuando no se diagnostica la causa de la distensión cervical.
Por ejemplo, una persona puede pasar meses o años con dolor de cuello que empeora al final de una larga jornada laboral. Si el dolor se debe a una mala postura o a movimientos repetitivos que provocan la distensión cervical, puede ser conveniente dar al cuello la oportunidad de descansar y evitar o modificar las actividades anteriores que implicaban largos períodos de mala postura.
Síntomas graves adicionales a la distensión cervical
El dolor de cuello que se irradia al hombro y al brazo puede requerir atención médica inmediata.
Si una distensión cervical es consecuencia de un impacto repentino o importante, como un accidente de automóvil, pueden producirse o agravarse otras lesiones en la columna cervical, como una hernia discal o una fractura. Estos son algunos de los síntomas que justifican una visita al médico para una evaluación más detallada:
- Dolor, hormigueo, entumecimiento o debilidad que se irradia hacia el hombro, el brazo o la mano
- Dolor de cabeza o mareos
- Problemas visuales o sensibilidad a las luces brillantes
- Inestabilidad del cuello
- Dificultad para mover los dedos
- Alteraciones de la marcha, como sensación de falta de equilibrio
- Pérdida de control de los esfínteres
También pueden presentarse otros síntomas molestos. Si después de un accidente grave se produce un fuerte dolor o inestabilidad cervical, es posible que el personal médico tenga que inmovilizar el cuello antes de trasladarlo al paciente al hospital.
